Cada vez más hospitales recurren a la IA para prevenir el riesgo de caídas

En muchos casos, los hospitales atienden a clientes con alto riesgo de caídas. Piense en pacientes confusos, con una afección neurológica o que toman mucha medicación. La solución informática Kepler Night Nurse (enfermera de noche) es cada vez más popular en la prevención de caídas en los hospitales. El sistema de detección de caídas garantiza que los empleados presten ayuda rápidamente en situaciones peligrosas o, mejor aún, el sistema evita tales circunstancias en muchos casos.

Kepler Night Nurse es un cambio innovador en el ámbito de la asistencia sanitaria. No sólo las residencias de ancianos están optando cada vez más por este sistema, sino que cada vez más hospitales se están decantando por este software de atención basado en inteligencia artificial (IA). Ya se han utilizado dispositivos de detección, pero sólo responden al movimiento. Estos sistemas tienen un tiempo de respuesta rápido, pero crean muchas falsas alarmas. Esto se debe a que reaccionan ante cualquier tipo de movimiento, como una almohada que se cae de la cama o una pierna que sobresale de la cama. Las numerosas falsas alarmas provocan fatiga de alarma: debido al gran número de falsas alarmas, los cuidadores dejan de responder con precisión a cada notificación, lo que crea situaciones peligrosas.

El director general de Kepler Vision Technologies, Harro Stokman, afirma: «Kepler Night Nurse vela por el bienestar de las personas y sólo envía alarmas reales. Por lo tanto, el sistema no se activa al agitarse una cortina. Así, el personal asistencial puede estar seguro de que cada alerta exige una acción real».

Kepler Night Nurse ahora aún más rápido

Gracias a la inteligencia artificial, Kepler Night Nurse comprueba con gran fiabilidad varias veces si un paciente se ha caído o está sentado en el borde de la cama, antes de emitir una alerta. El software sanitario, por su parte, lo hace en 10 segundos. Es entre 20 y 50 segundos más rápido que antes. «Cuando un cliente quiere ir al baño por la noche y se sienta en el borde de la cama, se avisa a un miembro del personal en menos de 10 segundos», explica Stokman. «De este modo, el sistema evita que un paciente con dificultades para caminar intente hacerlo sin compañía. Así, Kepler Night Nurse contribuye a crear un entorno más seguro para los pacientes.»

Kepler Enfermera de noche en el Hospital Universitario de Bruselas

Las caídas son un riesgo para los pacientes de edad avanzada que no debe subestimarse. Por ello, el departamento de geriatría de la UZ de Bruselas ha puesto en marcha un programa. El hospital detecta cuándo un paciente corre riesgo de caerse o se ha caído realmente. Junto con el Departamento de Biotecnología, eligieron a la Enfermera Nocturna Kepler. De este modo, el UZ Brussel se convierte en uno de los primeros hospitales belgas en empezar a utilizar el sistema de detección de caídas basado en inteligencia artificial. «Kepler Night Nurse es una tecnología maravillosa que nos permite llevar el seguimiento de los pacientes al siguiente nivel. Esto nos permite mejorar la calidad de la atención y la seguridad de los pacientes», afirma Michel Vervoort, de UZ Brussel.

Acerca de Kepler Night Nurse

Kepler Night Nurse es el primer software sanitario que utiliza inteligencia artificial (IA) para velar por el bienestar de las personas que necesitan cuidados. Con Kepler Night Nurse, los cuidadores pueden eliminar el 99% de las falsas alarmas, dejando más tiempo para los cuidados reales. Se garantiza que el sistema de detección de caídas es el más fiable del mundo en asistencia sanitaria. El software sanitario no sólo envía mensajes tras una caída, sino que también previene los accidentes de los clientes. Para ello se utiliza un único sensor óptico (en pleno cumplimiento de la Ley de privacidad AVG). El programa sustituye los anticuados sistemas de domótica, como sensores de movimiento, alfombrillas y pulseras, por botones de pánico. La empresa neerlandesa Kepler Vision Technologies suministra Kepler Night Nurse a hospitales y centros sanitarios de todo el mundo.

Este artículo se ha publicado en Emerce, Windmag y Medicalfacts, entre otros.